ANDIE MACDOWEL AIDAN QUINN
Febrero de 2006. Después del entrenar con el equipo de fútbol del instituto, Luke Abbate dio un paseo en coche con varios compañeros de clase. A pesar de las advertencias de los chicos, el conductor, que iba a una velocidad excesiva, perdió el control del vehículo, provocando un terrible accidente. Luke sufrió una lesión cerebral irreversible y murió en el hospital unos días antes de su decimosexto cumpleaños. Desde entonces, su familia y sus amigos decidieron rendirle homenaje en todos los partidos levantando una mano con los dedos separados, ya que el cinco era el número de la camiseta de Luke cuando jugaba.